domingo, 7 de agosto de 2011

Cap 3 Las Cloacas de Suburbia.



En las cloacas como era de esperar no había señales de vida humana, solo ratas. Ratas infestadas de pulgas, gérmenes y enfermedades. Cada vez que me movía aquellos animales repugnantes me seguían con sus ojos, aquellos ojos rojos , como manchados de sangre e irritados por la rabia eran escalofriantes.
Chillaban con fuerza, con tanta que casi parecían gritos de mujeres siendo torturadas y agonizando bestialmente.  Un pequeño grupo de ratas me rodeó sin darme cuenta, me las quedé mirando:
-Malditos bichos….-
Saqué la pistola y acabé con ellas, después de unos cuantos chillidos de ellas al fulminarlas , solo quedó silencio. Ahora ya sí estaba solo ,  por lo menos , eso creía , hasta que avanzando por la cloaca me encontré con  que no podía seguir más, extrañamente había un enorme barranco, y  justo antes de girarme para seguir buscando otra salida, noté  el gélido aliento en el cuello de una enorme rata que estaba de pié tras de mi y  me triplicaba el tamaño , me giré despacio para poder verla mejor, en la poca luz que entraba por algunas rendijas de las tapas de las cloacas pude distinguir  que era de negro pelaje , muy tupido , tenía una larguísima cola grisácea , enormes dientes que sobresalían de  su apestosa boca , dirigí la mirada hacia arriba mirando sus enormes ojos rojos que me parecían aún más rojos que el de las demás ratas, parecían lagos de sangre.
Me chilló en la cara y sin ponerme nervioso ni alterarme , entre carcajadas dije divertido :
-Vaya….Jeh…se nota que has estado comiendo mierda durante mucho tiempo ratita, apestas-
Apunté con mi pistola a su cara, presioné el gatillo y la bala no salió, había vaciado el cargador matando a las otras ratas.
-Mierda…..menudo …..marrón….-Pensé.
Guardé la pistola y pasé deslizándome entre sus patas traseras, eché a correr . Aquel maldito bicho me seguía corriendo con furia. Estaba “un poco” cagado eso tengo que reconocerlo , pero tenía que echarle narices al asunto, así que frené en seco, cargué la pistola con mi último cargador , me giré despacio y sonriendo burlón apunté a la enorme rata esperando a que se acercara un poco más.
-Vamos ratita….ven a jugar con “el tito” nose-
Nada más acercarse a unos quince pasos de mi, disparé,  la bala impactó en su ojo izquierdo , y a su vez atravesándole la cabeza, cayó justo a pocos centímetros de mis pies.
-Vaya, que lástima quería seguir jugando con la ratita….- Dije entre risas.
Le di un gran patadón en la cabeza al cadáver de la rata y me dispuse a  seguir adelante.
Ya bastante alejado de donde dejé el cadáver de la rata me paré a descansar en lo que parecía    un sofá viejo .
-Que cosas tira la gente a las cloacas….- Pensé acomodándome en el sofá.
Mi descanso duró poco, escuché pasos lentos que se acercaban, me levanté y me puse en guardia pistola en mano. El rostro de aquella chica que me ayudó asomó por una esquina.
-Tú....-Dije mientras la miraba a sus ojos violetas  y bajaba la pistola lentamente.
-Si yo. ¿No te alegras de verme?-Dijo entre risas sonriendo.
-La verdad…no sé  qué decir…-Contesté guardando mi pistola.
-Pues no digas nada-Se acercó susurrando-
-¿Que te trae por aquí, las cloacas?-Pregunté cruzándome de brazos.
-Lo mismo que a ti “cuervecito”-Aclaró sentándose en el sofá.
-¿También huías de Los Borradores?-Pregunté frunciendo el ceño.
-Exacto.  Venga acomódate-Me agarró y sentó en el sofá con ella.
-Va-vale…..-Tartamudeé  , un poco nervioso. No sabía por qué pero ella me ponía nervioso.
Ello solo me miró sonriendo.
-La ora vez… en el hospital…..-
-¿Si?-Se intrigó ella.
-Iba a preguntarte  tu nombre , pero te largaste-Le aclaré.
-Ah…jajaja cierto. Me llaman Alma-Rió mirándome.
-¿Te llaman?-Pregunté, mirando al suelo.
-Si es como un apodo. Como el tuyo ¿Verdad nose?-Sonrió.
-Si es verd….-Me corté yo mismo-……..¿Un momento como es que sabes….?-Levanté la cabeza para mirarla , pero ya no estaba allí sentada, había desaparecido, se había esfumado como aquella vez en el hospital.
Me quedé un par  de horas sentado en el viejo  sofá, pensando otra vez y analizando a aquella chica, solo me había encontrado con ella dos veces pero me dejaba confuso, extrañado y hecho un lio. Pero bien, ya sabía algo de ella se llamaba alma, bueno dijo que la llamaban así, pero….¿Quienes? Por más que pensaba solo conseguía dolor de cabeza decidí seguir buscando una salida.
Más adelante encontré una tapa de alcantarilla medio abierta, subí por la escalinata , aparté la tapa y salí de las cloacas.
Me sacudí el polvo y coloqué la capucha caminando hacia uno de los callejones de la calle, ya en uno de ellos apoyado en la pared se acercó a mí un tipo también encapuchado de sudadera morada y pantalón negro. Me puso la mano en el hombro y me susurró al oído:
-¿nose?-
-¿Sí?.....-
-Tengo algo para ti……-Dijo susurrando de nuevo.
 Puso en mi mano derecha un teléfono móvil negro con una calavera blanca y se marchó corriendo.



4 comentarios:

  1. A cada cual más interesante Nose. Me dejas intrigada, tienes una gran sentido de la narración y esta historia promete ser de gran misterio...mmm...te haré una entrada en mi blog. Te recomendare. Ya te pasare el link...

    saludos, Joanna.

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  2. Gracias por todo no toda la gente esta tan interesada como tu gracias por el apoyo y por recomendarme. No defraudaré a nadie aseguro que cada capitulo será mejor que el otro

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